Las arquetas sifónicas son uno de los elementos más importantes de la red de saneamiento. Las arquetas sifónicas son depósitos de distribución de tuberías de aguas residuales, dónde la entrada se encuentra a una cota más alta que la salida, evitando, por tanto, al estar permanentemente sumergida, el avance de gases nocivos y malos olores.
Las arquetas sifónicas como elemento de la red de alcantarillado se encuentran enterradas bajo la superficie del terreno, siendo accesibles a través de un registro cerrado mediante tapa. Este registro es de vital importancia puesto que permite el acceso a la arqueta sifónica para inspeccionarla y realizar las tareas de limpieza y mantenimiento. De igual modo es importante que las paredes y la solera de la arqueta sifónica presenten estanqueidad para evitar fugas de aguas residuales hacia el terreno adyacente.
¿Qué tienen de especial una arqueta sifónica?
Pues tal y como indica su nombre, se caracteriza por su funcionamiento, similar al de un sifón.
Un sifón, en el contexto del saneamiento, es un elemento que ejerce de freno del recorrido del agua residual que se evacua, impidiendo el paso del aire y permitiendo el paso del agua. Este fenómeno físico se consigue gracias a la acción de la gravedad: el aire tiende a subir, dejando el agua, de mayor densidad, en la parte inferior.
Generalmente, los inodoros, lavamanos y electrodomésticos disponen de un sistema de sifón en forma de “S” girada 90°. De igual manera que en el caso de las arquetas sifónicas, sirve para impedir que los malos olores de la red de saneamiento puedan subir y salir por el desagüe.
Podemos afirmar que las arquetas sifónicas actúan como “ambientadores”. Pero no solamente evitan malos olores, son también esenciales para evitar colapsos y atascos. Requieren por tanto un buen mantenimiento.
¿Qué tipo de mantenimiento necesita una arqueta sifónica?
Si garantizamos un buen mantenimiento de las arquetas sifónicas podemos evitar muchos problemas y consecuencias negativas para nuestras viviendas, ya que puede derivar a situaciones insalubres y desagradables.
Debido a que una arqueta sifónica es un elemento que se encuentra en constante uso, se deterioran y se ensucian de manera diaria, por lo tanto, es necesario realizar un correcto mantenimiento de manera frecuente.
Se deben realizar inspecciones periódicas, tanto de la misma arqueta como de las conexiones existentes, así como limpiezas con agua a presión, para evitar la acumulación de restos y sedimentos antrópicos.
En el caso que durante las inspecciones se detecten patologías asociadas, se procederá a su rehabilitación mediante el sistema más adecuado.
Principales funciones de las arquetas sifónicas
En resumen, las principales funciones de las arquetas sifónicas son:
• Conectar las tuberías de salida de la propiedad con la red principal.
• Acceso para la inspección, mantenimiento y limpieza, tanto de la propia arqueta como de las acometidas.
• Retención de malos olores.
• Acceso para la toma de muestras de agua residual de la red de saneamiento.
Las arquetas sifónicas son nuestras grandes aliadas en el saneamiento urbano para evitar la propagación de malos olores y sostener un ambiente salubre en nuestro entorno. Cuando andes por las calles de tu población, recuerda que debajo de tus pies existe una red extensa de arquetas sifónicas y tuberías que conducen las aguas residuales fuera de nuestro entorno habitable.
En Hidrotec, ofrecemos servicios de inspección, limpieza y rehabilitación tanto de arquetas sifónicas, como de cualquier otro elemento de la red de saneamiento, entre los cuáles destacamos tuberías, colectores y pozos de registro. Estos servicios se prestan en toda la provincia de Barcelona, Madrid y alrededores: Rubí, Sant Cugat del Vallés, Cerdanyola del Vallés, Terrassa, Sabadell, Badalona, Molins de Rei, L’Hospitalet de Llobregat, Coslada, Torrejón de Ardoz, Alcalá de Henares, Getafe, Leganés, Alcorcón, Móstoles, Fuenlabrada y Alcobendas, entre otras.